Los colores del metal – Cuando el calentamiento se convierte en una paleta

En mi taller, dejo que la llama pinte sobre el metal. Bajo el efecto del calor, la superficie gris de la escultura despierta y revela una paleta inesperada: rosas, naranjas, dorados, morados, luego azules profundos.
Cada color nace del fuego — cada matiz cuenta una emoción.

La magia del calentamiento: la alquimia del fuego y el metal

En esta escultura abstracta, el soplete se convierte en un pincel de luz.
Al acariciar el encaje de metal, busco el equilibrio perfecto entre control y azar.
Los colores aparecen, casi por magia: el rosa para las zonas apenas calentadas, el naranja y el dorado para los tonos intermedios, luego los morados y los azules cuando la temperatura sube.
Algunas partes permanecen grises, como un soplo de acero en bruto en medio del color — un contraste que me gusta especialmente.

Una obra única, impregnada de fuego

Cada calentamiento es una aventura: el calor, la duración, la textura del metal, todo influye en el resultado.
Es un encuentro entre la materia y la luz, un diálogo vivo.
Ninguna escultura reproducirá jamás exactamente la misma gama de colores — eso es lo que le da toda su singularidad.

👉 La escultura que descubres en este vídeo será puesta a la venta próximamente.

🎥 Vídeo: Philippe Buil crea los colores del calentamiento en una escultura abstracta de metal. El fuego revela una paleta única, del rosa al azul.